Un suceso inesperado en Culiacán, ocurrió cuando una camioneta y otro vehículo colisionaron en el cruce de la avenida La Costerita y el cruce Álvaro Obregón. Tras el impacto, los ocupantes de la camioneta Tucson, quienes estaban armados, abandonaron el vehículo y huyeron a pie.
Al inspeccionar la camioneta gris, las autoridades encontraron un artefacto explosivo y un arma de fuego. Debido a la peligrosidad de la situación, la Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) intervinieron de inmediato para acordonar el área y tomar control de la investigación.
Un equipo especializado en manejo de explosivos del Ejército Mexicano llegó al lugar para neutralizar el artefacto. Un miembro del equipo antibombas, vestido con un traje especializado, manipuló el explosivo, lo que permitió garantizar la seguridad en la zona.
La colaboración entre fuerzas federales y locales evitó un desastre mayor en Culiacán, señalaron fuentes de seguridad.
Las investigaciones continúan para dar con los responsables de este incidente, mientras que las autoridades no descartan la posibilidad de que esta acción esté relacionada con actividades del crimen organizado.
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