Río de Janeiro, Brasil. Una operación de seguridad sin precedentes tuvo lugar esta semana en las favelas de la ciudad de Río de Janeiro, resultando en un saldo de al menos 60 muertos y 81 detenidos. El operativo fue llevado a cabo por más de 2,800 efectivos de las fuerzas de seguridad brasileñas, quienes se enfrentaron a la organización criminal Comando Vermelho.
La operación ha sido calificada como la más sangrienta en la historia reciente de Brasil, y tuvo lugar el martes en las favelas de Alemão y Penha, áreas conocidas por su fuerte presencia de grupos delictivos. Durante el enfrentamiento, los criminales utilizaron drones equipados con explosivos para atacar a las fuerzas del orden, lo que provocó un aumento considerable de víctimas.
Hasta el momento, se ha confirmado que 4 agentes de la policía fallecieron durante los tiroteos. Las autoridades locales aseguran que la operación continuará, a pesar de las bajas y el caos generado en la zona. Las autoridades también han destacado que este operativo afectó a alrededor de 280,000 personas, quienes han experimentado el cierre temporal de sus comunidades y restricciones severas de movilidad.
Los enfrentamientos armados, que incluyen el uso de vehículos aéreos no tripulados, han dejado a la ciudad en una situación de gran tensión. La ciudadanía ha expresado su preocupación por la creciente violencia y el impacto social que estas operaciones puedan tener en la población más vulnerable.
Imagen enviada por **Juan Torres** (lector)
Imagen enviada por **Laura Castro** (lectora)
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